Como ya vimos, el signo Solar es importantísimo
para poder definir la esencia o naturaleza de una persona, pero la esencia de
las constelaciones zodiacales se encuentra no sólo en el signo solar del
nacimiento, sino también a través del decanato al que pertenecen, el cual
señala el propósito fundamental para el alma que reencarna.
Todos sabemos que el Sol tarda 30 día en
recorrer un signo, lo que al correlacionarse con los tres decanatos
que conforman cada signo constituyen una división de tres partes iguales o de
10 días por decanato. Los decanatos son puntos de un signo zodiacal que
presenta la síntesis final de las “triplicidades astrológicas” que reagrupan a
los 12 signos por “elementos”: tres signos de fuego, tres de tierra, tres de
aire, y tres de agua.
Los decanatos agrupados en un signo zodiacal absorben la
influencia de los otros dos signos del mismo elemento, por ejemplo: Aries y sus
tres decanatos abarcarán a los tres signos de fuego, primero Aries/Aries,
segundo, Aries/Leo y tercero Aries/Sagitario. Un decanato zodiacal puede llegar
a establecer cuál es el contenido misterioso de la misión espiritual que
acompaña al alma al nacer.
También nos indica que además de nuestro planeta regente,
contaremos con la influencia de otro planeta lo que dará un temperamento y
cualidades adicionales o diferentes a las demás personas de nuestro signo,
dependiendo del decanato que en el cual nacieron.
¿Qué dentro del mismo signo solar existen tres temperamentos
diferentes?... por supuesto que sí.
Descubre a qué Decanato perteneces en la siguiente tabla.
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